lunes, 30 de julio de 2007

SUIZOS EN LA CULTURA BOLIVIANA


La literatura, música y escultura llegada de Suiza


Por Elías Blanco Mamani

Suiza, el país de las cuentas bancarias, de los Alpes, de la Comunidad Europea, también ha exportado recursos humanos valiosos para el enriquecimiento de las expresiones culturales en Bolivia. Gilbert Favre, Stefan Gurtner y Francine Secretan se han encargado de proyectar la capacidad creativa nacida en la nación rodeada por Francia, Alemania, Austria, Liechtenstein e Italia. A continuación reseñamos la vida y obra de estos tres ilustres suizos en la cultura boliviana.

GILBERT FAVRE

Músico y promotor cultural. Nació en Suiza (s. XX). Antes de venir a Bolivia estuvo en Chile donde trabajó junto a Violeta Parra en la denominada ‘Carpa de Violeta’. Por diferentes circunstancias se trasladó hasta la ciudad de La Paz y aquí tocó la quena en el grupo ‘Los Jairas’, junto a Yayo Joffre y Ernesto Cavour. También se relacionó activamente con la Peña ‘Naira’, centro cultural que fue creada inicialmente por Pepe Ballón en 1965 como galería de arte, y convertida en Peña en 1966 a sugerencia de Favre. Así se estableció uno de los primeros espacios que tuvo el fin principal de difundir la música folklórica boliviana.
¿Por qué hacía esto Favre?, Pepe Ballón recuerda: “El era un gran amante de la música boliviana y coincidimos en la necesidad de un esfuerzo por la difusión de la música”. Y más adelante define Ballón: “Ese gran músico suizo es el hombre clave para el desarrollo del folklore nuestro. ¿Por qué? ¡Porque era extranjero! El hecho de que un extranjero tocara la quena, fue la causa para que se fuera aceptando nuestro folklore. Se paraban y decían ¡Ah, que lindo toca! Y como a la peña venía gente de Francia, España, nuestra sociedad, la ‘hamburguesía’ de este país, se fue acercando. Los músicos nuestros, entonces, aunque ya eran buenos, y triunfaban en festivales como el de Salta, aquí eran poco conocidos”. Gilbert Favre estuvo tan identificado con el proyecto de la Peña que se hizo director artístico de la misma y tenía su pequeña habitación en la misma casa. Allí vivía y allí también tuvo lugar el matrimonio civil en que simultáneamente se casaron Alfredo Domínguez y Favre (con Indiana Reque).
Uno de los pocos registros del pensamiento de Favre está dado en una entrevista realizada por el periódico ‘El Diario’ y publicado en junio de 1967; en esa oportunidad -como miembro de ‘Los Jairas’- habló del carácter de la música boliviana al afirmar: “…queremos dejar bien sentado que las esencias estéticas del folklore boliviano nata tienen que ver con las farándulas de chichería o de las habituales jaranas. Los elementos de belleza que conforman la música boliviana contienen en sí un mundo jerárquico, una substancia intemporal y el genuino perfume que caracteriza a la belleza pura, sin adulteraciones. Las universidades, la radio y el teatro serán los escenarios de nuestras actuaciones”.

STEFAN GURTNER

Escritor y activista cultural. Nació en Berna, Suiza, en 1962. Radica en Bolivia desde 1987. Fundador y director de la Comunidad ‘Tres Soles’ para niños y jóvenes de la calle de la ciudad de El Alto. Director del grupo de teatro ‘Ojo Morado’ asentado en Quillacollo, Cochabamba, desde 1999.
Los editores de su novela Pata Chueca (editado el 2004), en breve reseña de la obra anotan: “Pata chueca, un sabio y viejo perro callejero, vive en los basurales de El Alto y toma bajo su protección a Chiquitín, un perro de ‘buena familia’ que, por una perrita moteada, abandonó su hogar. En busca de un refugio, de comida y sobre todo de cariño se unen a cuatro niños lustrabotas que viven en las calles de La Paz. Son testigos de su lucha por sobrevivir, trabajando, inhalando clefa y robando”. Gurtner ha publicado una segunda novela titulada El grano verde, también el 2004.
Sobre su trabajó en el terreno del teatro, Gurtner definió en 1988: “Lo que nosotros, como grupo de teatro Ojo Morado practicamos, es un teatro pedagógico lo bastante amplio como para realizar un trabajo de concietización y de autosostenimiento. / Lo que planteamos no es una idea nueva y nuestro objetivo es el de convertir al teatro en la actividad pedagógica central de un programa de educación y formación de niños y jóvenes de la calle, considerando que la mayoría de las instituciones que trabajan con este tipo de población realizan asistencial y paternalista, sin coadyuvar en la formación de un proyecto de vida, ni individual ni grupal”.

FRANCINE SECRETAN BERTHOUD

Escultora nacida en Neuchâtel, Suiza, en 1948. Radica en La Paz desde 1974. Estudió en la Escuela de Bellas Artes de Ginebra (1968-1970). Luego ingresó a la Kunstgewerbe Schule, de Basel, en la misma Suiza. En 1972 se diplomó como profesora de dibujo de la Escuela Normal de Ginebra. Llegó a Bolivia con el antecedente de haber realizado exposiciones en Francia y Suiza, mostró sus obras en el país a partir del mismo año de su arribo. Luego visitaría Estados Unidos, Holanda y España. En 1996, a invitación de la Alcaldía de La Paz, hizo las ‘Illas del Gran Poder’ con que se premió a los ganadores de la Entrada Folklórica del ‘Gran Poder’.
En 1975 dijo: "Las formas que hago nacen naturalmente, simplemente. Yo entrego todo mi amor, todos mis sentimientos, toda mi felicidad de ser mujer a través de la luz que juega en estos volúmenes de madera".
A juicio de Teresa Gisbert: "Francine Secretan recupera para nosotros una imagen, una imagen para ella creada de la fecundidad ciertamente pero imagen de la naturaleza ciega que avasalla con una vitalidad sin límites. Sus obras en metal, madera y onix nos muestran algo que recuerdan las entrañas vivas. Secretan se vale de una estética que se acerca a las expresiones más logradas de los llamados pueblos sin historia". Otra valoración pertenece a Mario Ríos Gastelú, quien en 1991 anotó: “Sus ideas flotan entre un pasado de gloria precolombinas y un presente que modifica las formas y enriquece el estilo. Ahí están las Esculturas Escaliformes que rescatan lo tihuanacota de hace cientos de años en un retorno al plano artístico, donde resalta la belleza ancestral en un juego de formas elegantes, discriminadas unas de otras para hacer un conjunto de esculturas preciosas...".
En su trayectoria artística ha ganado varios premios en el prestigioso Salón ‘Pedro Domingo Murillo’, algunos de ellos -siempre en escultura- son: Primer Premio con la obra ‘Deidad de montaña’ (1977); Primer Premio con la obra ‘Huanca para una cosecha’ (1988); Premio Único con la obra ‘Atravesando el ecosistema’ (1991); Gran Premio por su obra ‘Ofrenda de la tierra al cielo’ (1998). También ha ganado títulos en el Salón Internacional de Arte (SIART) que se realiza en La Paz; tiene una Mención Especial con la obra ‘Ofrenda a los ancestros’ (1999) y una Mención de Honor con la obra ‘Guardián de la memoria’ (2003).

1 comentario:

nois de lean dijo...

muy buena información